Le arrojaron botella a una avioneta para robarle las pertenencias al piloto

Le arrojaron botella a una avioneta para robarle las pertenencias al piloto

La inseguridad se metió en la Base Aérea de Morón, donde todavía funcionan algunas empresas privadas y la escuela de vuelo, para asaltar a un piloto en pleno carreteo. Las cámaras de la avioneta mostraron cómo dos sujetos lo interceptan y le causan daños. Dicen que hubo dos incidentes en pista. La ex 7° brigada de la Fuerza Aérea fue cerrada al menos hasta el lunes.

El episodio ocurrió en la tarde de ayer, cuando dos personas irrumpieron en la pista y le arrojaron una botella a una aeronave que se prestaba a despegar.

Ahora las autoridades intentan esclarecer lo ocurrido. El incidente ocurrió justo cuando la avioneta Cirrus SR-22, matriculada N731WB, se encontraba en carrera de despegue por la pista 2. Poco después de alcanzar la velocidad de rotación y elevarse, aparecieron dos personas por la izquierda de la aeronave y le arrojaron una botella que impactó de lleno en el borde del ala.

Si bien la aeronave pudo regresar sin mayores inconvenientes a suelo, sí sufrió daños de consideración en la superficie a raíz del golpe con el objeto y así se puede ver en las fotos que le tomaron una vez que aterrizó en la Base.

En un audio de wassap, el piloto explicó la secuencia: “Estaba despegando y salieron tres personas del costado de la pista y uno tiró una botella. Aborté y quedó cerrado el aeródromo por una hora”.

Según su testimonio, hay un tercer involucrado en el ataque, el cual no llega a verse en las imágenes. No se reportaron víctimas ni heridos. El aeródromo de Morón alberga a la sede del Instituto Nacional de Aviación Civil (INAC), con amplias instalaciones que incluyen hangares, aulas, gabinetes, laboratorios, biblioteca, talleres, sala de conferencia e informática y microcine.

En sus terrenos se alojan el Museo Nacional de Aeronáutica y el Polo Industrial y Tecnológico Aeronáutico de Morón (PITAM). Durante mucho tiempo allí estuvieron las instalaciones de la empresa CATA Línea Aérea, que ofrecía servicios de traslado de pasajeros, carga y correo desde Ezeiza y Aeroparque.

Con el kirchnerismo, la Base pasó a formar parte de la jurisdicción del Ministerio de Defensa de la Nación, aunque durante el período de Mauricio Macri volvió a manos de la Fuerza Aérea, que hoy sólo tiene a la Base de El Palomar.